miércoles, abril 30, 2014

Cárcel en la ilegal base naval de Guantánamo sigue abierta 12 años después

Foto: TELESUR


WASHINGTON.— Doce años después de la llegada de los primeros detenidos a la cárcel estadounidense en la ilegalmente ocupada Base Naval de Guantánamo, se estima que continúan allí 154 presos.

Reporta AFP que esos detenidos proceden de unos 20 países; más de la mitad de ellos yemeníes. Las otras nacionalidades más representadas son las de afganos, argelinos y saudíes.

Unos 76 detenidos han recibido una “aprobación de transferencia”, en su casi totalidad desde el 2010, lo que significa que en teoría son excarcelables. Pero permanecen detenidos en ausencia de países que los acepten.

Un total de 45 detenidos no recibieron esta “aprobación de transferencia”. Son considerados demasiado peligrosos para ser liberados, pero no pueden ser juzgados por falta de pruebas en su contra.

Ocho prisioneros fueron condenados por tribunales militares especiales, de los cuales seis se declararon culpables, pero la justicia federal revirtió las condenas de dos de ellos, mientras que otros dos apelaron la sentencia. Cuatro de los condenados fueron transferidos hacia sus países de origen.

El centro de detenciones es una de las herencias más oscuras de George W. Bush (hijo), y una de las más obvias promesas incumplidas de Barack Obama, quien prometió cerrarlo desde que llegó a la Casa Blanca.
Abrió en su forma actual tras los atentados del 11 de septiembre del 2001 para confinar allí a los supuestos sospechosos de terrorismo, aunque no hubiera pruebas en su contra.

Si bien Obama ha mencionado en algunas ocasiones su intención de cerrar la cárcel, el tema ha pasado largas temporadas en el olvido de la opinión pública.

Recuerdan aniversario 170 del natalicio de Pedro Agustín Pérez

Por: Ariel Soler Costafreda



El Mayor General Pedro Agustín Pérez, el más ilustre de los guantanameros, considerado el hombre que salvó la Revolución en 1895, fue recordado ayer 29 de abril, en esta ciudad, al cumplirse el aniversario 170 de su natalicio.
Poemas y canciones animaron la gala político cultural que en honor del destacado jefe mambí y primer alcalde de Guantánamo se escenificó frente a su estatua, en el céntrico parque Martí, de la capital más oriental de Cuba. 
José Sánchez Guerra, Historiador de la Ciudad, hizo un panegírico del prócer, quien comandó las operaciones militares dirigidas a proteger la vida de los principales jefes de la Guerra, Necesaria tras los sucesivos desembarcos, por Duaba el primero de abril de 1895, y Playitas de Cajobabo 10 días después. 
Recordó que las acciones lideradas por “Periquito” en las serranías de Yateras en abril de 1895  posibilitaron que Antonio Maceo atravesara la peligrosa zona, encontrar y salvar a José Maceo, y junto a éste librar a José Martí y Máximo Gómez de mortal emboscada en Arroyo Hondo.
Destacó que como singular excepción, Periquito Pérez asumió la dualidad del mando militar y  político de una región en la Isla: el primer encargo por orden del Mayor General Antonio Maceo, y la representación del Partido Revolucionario Cubano por aprobación expresa de su delegado, José Martí.
Sánchez Guerra narró la analogía histórica entre Calixto García, en Santiago de Cuba, y  Pedro A. Pérez, en Guantánamo,  quienes libraron a las tropas americanas de sucumbir  a  manos españolas y a cambio recibieron la prohibición de entrar con las huestes mambisas en esas ciudades al término de la conflagración.
Ante tal afrenta, Pedro Agustín Pérez se retiro al ingenio San Idelfonso, en las cercanías de Guantánamo, donde entrevistado por el New York Herald, advirtió: “Si nuestra independencia no queda asegurada ahora, es mi deseo continuar luchando por ella treinta años más, si fuera necesario”.
Pedro Agustín Pérez murió a los 70 años de edad, el 13 de abril de 1914.

lunes, abril 28, 2014

Adios al tallador de piedras ( + Fotos)


Este domingo 27 de abril dejó de existir físicamente un guantanamero excepcional, el que dedicó gran parte de su vida a crear el único Zoológico de Piedras que existe en el mundo.

Ángel Iñigo Blanco, se convirtió por su creatividad en uno de los más grandes escultores de esta provincia;  fue un hombre modesto de profundas convicciones humanas, sin formación académica,  pero con muchos deseos de expresar a través de su obra su admiración por la naturaleza. 

De sus manos y cincel emergieron diferentes tipos de animales  entre ellos: leones, conejos, serpientes, caballos, rinocerontes, ranas y hasta una aldea aborigen, en su conjunto, admirados siempre por los más de 10 000 visitantes, que anualmente llegan hasta esta instalación para disfrutar de esa maravilla del arte.

Desde que se conoció de su deceso, todo el pueblo guantanamero asistió espontáneamente a rendirle tributo, diciendo adiós al querido tallador de piedras, como en muchas ocasiones le llamaron, Iñigo deja una obra consolidada y digna de preservar para las futuras generaciones. Desde 1985 el Zoológico de Piedra,  es considerado como Patrimonio Cultural Nacional.  








El aberrante Campo 7 de la Base Naval en Guantánamo

Todo el mundo reconoce su existencia, pero nadie habla de él: oculto en algún sitio entre las áridas colinas de Guantánamo, el Campo 7 alberga a 15 detenidos de “gran valor” para Estados Unidos entre muros ultraseguros.


“Nosotros sencillamente no hablamos sobre el Campo 7”, cuenta la general Marion Garcia, comandante adjunta de la fuerza militar que gestiona la prisión estadounidense ubicada en la bahía cubana de Guantánamo.

Es imposible saber cuándo fue creado o dónde se encuentra: el Campo 7 ni siquiera figura en la información brindada a la prensa sobre la prisión.

“No es un secreto que está aquí, pero lo que sí está clasificado es su localización y cualquier otra operación sobre el campo o quién está allí”, explica el capitán John Filostrat, portavoz de las autoridades.

Los tres abogados que lograron visitarlo prácticamente no tienen derecho a decir nada sobre lo que vieron.
Suzanne Lachelier cuenta a la AFP que ella y Richard Frederico fueron transportados hasta allí en octubre de 2008 en la parte de atrás de una camioneta “sin ventanas” , en un viaje que duró “20 o 25 minutos” para desorientarlos.

“¿Quién lo maneja?”, se pregunta Lachelier, afirmando que “nada justifica las medidas de seguridad tomadas en el Campo 7 a menos que haya algo que el gobierno quiera ocultar” .

Más recientemente, el 15 de agosto de 2013, Jay Connell visitó a su cliente tras un viaje en un mini bus con las “ventanas tapadas”.

Sobre el campo específicamente, explica a la AFP que “todo está diseñado como celdas de confinamiento solitario”. Los presos “comen dentro de las celdas, no hay vida comunitaria… Jamás vi una instalación tan aislada”, recuerda.

 

INSOSTENIBLE


De acuerdo a la información obtenida de varias fuentes, en el campo hay quince detenidos de “gran valor” que podrían brindar información importante o ya lo hicieron en el curso de los brutales interrogatorios en prisiones secretas de la CIA, considerados por muchos como torturas.

Entre ellos está Khaled Cheikh Mohammed, autoproclamado arquitecto de los atentados del 11 de setiembre de 2001, quien fue sometido 183 veces a simulaciones de ahogo antes de su traslado a Guantánamo.

Otro es el yemení Ramzi Ben al-Chaiba, también acusado por los atentados del 11/9, quien recientemente se quejó ante un tribunal militar porque las autoridades no han hecho nada para acallar los ruidos en su celda, que según él son provocados deliberadamente por los guardias para impedirle que duerma.

También está el paquistaní Ali Abd al-Aziz Ali, quien se cree sirvió como modelo para la película “Zero Dark Thirty” por los maltratos a los que fue sometido.

El saudí Abd Rahim al-Nashiri, supuesto cerebro del ataque al buque estadounidense “USS Cole” que dejó 17 muertos en el 2000 en Yemen, y su compatriota Abu Zubaydah, acusado de ser el brazo derecho de Osama Bin Laden, también están en el grupo.

Dado los antecedentes de los encarcelados, “existen todas las razones para creer que (el campo) está gestionado por la CIA” y no por la fuerza de coalición JTF-GTMO que maneja los restantes campos de Guantánamo, explica un experto sobre la prisión que pidió permanecer bajo el anonimato.

Los transportes al Campo 7 están “organizados a través de alguien más, nosotros simplemente hacemos lo que se nos ordena”, explica la general Garcia al ser consultada sobre las medidas de seguridad para visitar esta parte de la cárcel.

“Realmente no es tan misterioso, lo único que puedo decirle es que es una instalación muy bien manejada y estoy orgullosa de lo que estamos haciendo allí”, agrega.

Sin embargo, durante una audiencia ante el Congreso, el general John Kelly, comandante de la región sur que supervisa Guantánamo, estimó que era necesario reemplazar el Campo 7 porque era “cada vez más insostenible” por problemas en los cimientos y drenajes, ya que se creó como estructura para uso temporal.

viernes, abril 25, 2014

Obama: la cárcel en la ilegal base naval en Guantánamo tiene que cerrarse ya

La cárcel que el gobierno de los Estados Unidos tiene  ilegalmente ocupada en la Ilegal Base Naval en la provincia de Guantánamo,  es catalogada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH ) entre los principales desafíos en el continente americano.  


Según opiniones de la CIDH,  el gobierno de Barack Obama  ha fallado en el compromiso de garantizar el derecho a la libertad de los detenidos en la prisión la Base Ilegal Naval de Guantánamo, pues desde su apertura se ha recomendado su inmediato cierre así como la posibilidad de exigir permiso para visitar la prisión y  entrevistar libremente a los detenidos.


Un total de 154 presos de los 779 que estuvieron encarcelados,  permanecen recluidos en la prisión ubicada en la base naval de Estados Unidos en Guantánamo,  después de la llegada de los 20 primeros desde el 11 de enero de 2002, hace ya doce años. Estos reos proceden de unos 20 países,  la mitad de ellos son yemeníes y los otros de Afganistán, Argelia y Arabia Saudí.

De estos detenidos, 76 han recibido una “aprobación de transferencia”, en su casi totalidad desde el 2010, sin embargo, aún  permanecen detenidos en ausencia de países que los acepten. Por su parte, 45 reos  no recibieron esta “aprobación de transferencia”, por la sencilla razón de que a su juicio, son considerados demasiado peligrosos para ser liberados, sin embargo,  no pueden ser juzgados por falta de pruebas en su contra.

La tenencia de este  centro de detenciones  en la base naval yanqui, una de las promesas incumplidas de Barack Obama, quien se  comprometió a cerrar el mentado lugar  al asumir la presidencia en 2009. Si en su primer mandado, el presidente estado unidense se jactó exhibiendo una orden que disponía la clausura del centro de detención en un año, a la postre cedió a las presiones de legisladores republicanos y demócratas, opuestos a la idea. Entonces… ¿de qué hablamos si no hay fuerza moral para el cierre?...

Doce años tiene ya este centro de detención y aunque ha  devenido en símbolo de más de diez años de fallos de la administración de Obama en cuanto al respeto a los derechos humanos, la pregunta que la opinión pública mundial se hace es la misma: ¿Cuánto tiempo hay que seguir esperando para que Obama cumpla la promesa de cerrar la cárcel y la ilegal base militar como lo reclama Cuba y  la comunidad internacional?


Estoy segura de que a estas interrogantes, ni el propio presidente Barack Obama encontrará una respuesta, no porque no la tenga, sino porque no la quiere encontrar. Al parecer no hay voluntad por parte de la administración estadounidense para resolver esta situación,  máxime cuando este centro de detención es un verdadero infierno donde se pisotean groseramente los derechos humanos.

Ha pasado una década y la mayoría de los inculpados que están en la mentada cárcel llevan más de 12 años sin enfrentar cargos concretos. La prisión que tiene la ilegal base naval yanqui en Guantánamo es un establecimiento nefasto y la situación que se vive ahí dentro no se hace esperar más. Por lo tanto, este es el momento para que  Barack Obama se percate de que definitivamente el establecimiento carcelario tiene que cerrarse.

miércoles, abril 16, 2014

Cuando Cuba se vistió de verde olivo para siempre

 
Por: Raisa Martín Lobo

El 16 de abril todos los cubanos se visten de verde olivo o llevan los colores de la Patria en el corazón. La fecha marca un hito en nuestra historia: Se conmemora el aniversario 53 de la proclamación pública del Carácter Socialista de la Revolución por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, en las propias narices del Imperio.

Al mediodía de ese día, en el sepelio a los caídos en los bombardeos de los aeropuertos militares de Ciudad Libertad, San Antonio de los Baños y el Antonio Maceo de Santiago de Cuba, a lo largo de la calle 23 del Vedado, La Habana, Fidel Castro hizo pública una declaración histórica: la del carácter socialista de la Revolución Cubana.

Una ola humana siguió el cortejo. Desde los balcones, las banderas cubanas, los rostros serios y las flores lanzadas al paso de los siete coches fúnebres impregnaban un aire solemne a la silenciosa marcha. Y allí, ante la masa enardecida, el Comandante en jefe afirmó: "Porque lo que no pueden perdonarnos los imperialistas, es que estemos aquí, lo que no pueden perdonarnos los imperialistas es la dignidad, la entereza, el valor, la firmeza ideológica, el espíritu de sacrificio y el espíritu revolucionario del pueblo de Cuba”.

"Eso es lo que no pueden perdonarnos, que estemos ahí en sus narices, ¡y que hayamos hecho una Revolución Socialista, en las propias narices de los Estados Unidos!" El genio previsor y político de Fidel Castro proclamaba el carácter socialista de la Revolución Cubana y emplazaba a la unidad de todo el pueblo para protegerla hasta la última gota de sangre.

En ese momento estaba claro que la autonomía, la soberanía y el derecho a conquistar su propio destino, era inseparables. Reconocía Fidel Castro que únicamente la liberación social sería capaz, en el contexto de Cuba, de garantizar la emancipación nacional y eso lo podía ser la obra de una Revolución "de los humildes, con los humildes y para los humildes”.

Aquel anuncio se convirtió en una fuerza política sorprendente que conmovió de pasión combativa a todo el pueblo. Las armas levantadas en las manos milicianas, fue una escena inolvidable. Allí nace la convicción ineludible de soberanía que hoy nos salva, acrecienta y une frente a cada nueva agresión enemiga.

martes, abril 15, 2014

15 de abril de 1961: Preludio de una invasión mercenaria a Cuba

Por: Raisa Martín Lobo

El 15 de abril de 1961 se iniciaba una epopeya gloriosa para Cuba. El enemigo imperialista forjaba desde los Estados Unidos, una agresión armada y preparaban acciones agresivas con el objetivo de hacer desaparecer la Revolución. Ese día, miles de cubanos estaban congregados en sus respectivos puestos de combate.

La primera acción perpetrada para destruir la defensa aérea del Ejército Rebelde, fueron aviones camuflados con la insignia de lasa Fuerzas Armadas revolucionarias que bombardearon
el aeropuerto de Ciudad Libertad, la base aérea de San Antonio de los Baños, y el aeropuerto de Santiago de Cuba.  Todo un teatro armado para hacer creer a la opinión pública internacional que en nuestro país tenía lugar una rebelión interna.
 

Siete fallecidos, entre ellos mujeres y niños que vivían en lugares cercanos a los puntos de bombardeo, decenas de heridos y viviendas destruidas como saldo de la cobarde acción organizada y financiada por Estados Unidos, fue el saldo de la agresión militar.

Se equivocaba el Imperio y de qué manera.  La rápida respuesta del pueblo cercaron el intento del gobierno de los Estados Unidos y de inmediato, toda Cuba se puso en pie de lucha junto a su Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz. ¿Por qué el resentimiento del gobierno de los Estados Unidos hacia la Revolución Cubana?, esa era justamente la pregunta que muchos se hacían. 


En 1961 y con sus objetivos bien definidos, se habían promulgado  leyes que laceraban los intereses estadounidenses en la Isla y con ello, se destruía la estructura económica que dejaron atrás los gobiernos de la seudorrepública. Los lacayos de la tiranía batistiana que habían huido hacia el vecino del Norte, demandaban el fracaso del Gobierno Revolucionario Cubano.  

"Nuestro país ha sido víctima de una criminal agresión imperialista.... Cada cubano debe ocupar el puesto que le corresponde en las unidades militares y en los centros de trabajo sin interrumpir la producción, ni la campaña de alfabetización, ni una sola obra revolucionaria. La Patria resistirá a pie firme y serenamente cualquier ataque enemigo, segura de la victoria."  Era el parte oficial firmado por el Comandante en Jefe Fidel Castro que dictaba a media mañana del 15 de abril.

Una vez realizado el pase de revista a los resultados de los ataques, se patentizó que la destrucción de los aviones cubanos en tierra había fracasado. En los bombardeos, el enemigo sufrió severas pérdidas. Algunos aviones no regresaron a las bases, otros regresaron averiados producto al fuego antiaéreo cubano, que demostró que no se podía violar ilegalmente el cielo patrio. Ese día, fue el preludio de aquella invasión mercenaria.

Fernando González: El castigo no fue contra mí, contra nosotros; fue una venganza contra un proceso revolucionario

(Tomado del blog de Hernando Calvo Ospina)

Los vi venir. La cita era en la Plaza de Armas, del lado de El Templete, en La Habana Vieja. Creí que nunca llegarían. Su paso era lento, despreocupado. Querían mirar y reparar en todo. Era como si quisieran descubrir la ciudad. Como si fueran los más dedicados turistas.
 
Quise ir a su encuentro pero desistí cuando miré a su alrededor. Muchos ojos se abrían desmesurados, como no creyendo que eran ellos. Entonces una mujer se acercó a ellos, y los tocó para constatar que sí eran. Se lanzó en abrazos. Avanzaron unos pasos y llegaron otros tres jóvenes para saludarlos. Pero la mayoría se contentaba con admirarlos. Ellos, con la mayor ternura recibían y observaban esas demostraciones de cariño.
 
Después de haber escuchado una versión de la Guantanamera, adaptada a los “Cinco Héroes” por tres músicos callejeros, al fin llegaron al lugar de la cita.  
Ahí sí me acerqué. Mejor, me fui directo para abrazar a Fernando. Nos fundimos en un abrazo como poquísimos he dado y he recibido de un hombre. 

Mi admiración por su noble labor y sus años pasados en prisión se fueron en el mío. Luego saludé a su esposa, Rosa Aurora Freijanes. No supe a quién debía saludar en primero: René, el otro antiterrorista libre, o a su esposa Olga, con los cuales ya había tenido la oportunidad de compartir unos momentos meses atrás. Creo que primero la abracé a ella. En ese momento noté que una dama trataba de pasar desapercibida: Elizabeth Palmeiro, la esposa de Ramón Labañino, otro de los antiterroristas cubanos que aún sigue pagando injusta condena en Estados Unidos.
 
Dominique Leduc, secretaria general de la Asociación de solidaridad France-Cuba, estaba más que sorprendida. Yo la había invitado sin precisarle de qué se trataba.
 
Había mucho viento, lo que dificultaba filmar en la calle. Por eso pedí a la dirección de un hotel que me permitiera hacerles la entrevista en el pequeño patio. Apenas dije de quienes se trataban aceptaron de inmediato: “Es un gran honor para nosotros acoger a nuestros Héroes”. No había dado la espalda para ir en su búsqueda, cuando sentí que la noticia comenzaba a propagarse entre los trabajadores. “Este pueblo les debe mucho”, le escuché decir a un hombre de piel bien negra, muy emocionado.
 
Ahí tenía sentado a Fernando para hacerle unas preguntas. Antes de que Roberto Chile, el reconocido camarógrafo cubano, diera luz verde a la filmación lo observaba y me preguntaba: ¿¡cómo pueden ser tan humildes, tan humanos, cuando en cada esquina y hogar de Cuba están presentes!?
 
“Los guardias me despertaron a la una de la madrugada del jueves 27 de febrero. Después me encadenaron de manos, cintura y pies, y a las 3h30 me sacaron de la prisión de Safford (Arizona). Presuntamente estaba en libertad, pero ahí mismo, en la puerta, fui detenido por las autoridades de migración. Y me llevaron en una caravana de vehículos muy custodiado hasta la ciudad de Phoenix. Luego a Miami… El operativo duró unas 36 horas. Siempre estuve esposado, y en medio de un gran operativo de seguridad que me sorprendió.
 
“Hasta en el avión que me trajeron a Cuba traía esposas, aunque eran de plástico, las que cortaron cuando el avión abrió la portezuela en el aeropuerto José Martí de La Habana. Sólo en este momento me sentí libre.”
 
¿Cómo se comportaron los presos contigo? ¿Sabían quién eras?

Al comienzo era un preso más. Pero poco a poco se fue haciendo conocido el caso debido a la solidaridad internacional. La solidaridad de las organizaciones en Estados Unidos logró que en algunos canales de televisión alternativos se informara de nosotros. Además, los materiales de lectura que recibíamos los compartíamos con los otros presos. Esto fue llamando la atención, y así se fueron dando cuenta que éramos personas con un pensamiento diferente. Entonces venían para charlar de Cuba, de la Revolución.
 
Estuviste preso quince años, cinco meses y quince días. ¿Fue un castigo que se le dio a Fernando González?
 
Desde el inicio de este proceso fuimos conscientes de que estábamos pagando por ser cubanos revolucionarios. Por estar realizando una labor para el pueblo de Cuba, para la Revolución, y hasta para el pueblo de Estados Unidos, pues evitamos acciones terroristas que le hubieran podido afectar.
El castigo no fue contra mí, contra nosotros: fue una necesidad de venganza por el odio que tienen contra un proceso revolucionario, contra una historia. Y así lo asumimos.
 
¿Cómo te sientes en Cuba?

Me siento bien libre, y no solo por haber salido de un régimen de cárcel. Tengo esa libertad que me negaron en Estados Unidos. Aquí tengo la libertad de hacer lo que quiero, incluyendo la libertad política. Es que en Estados Unidos no se es libre de pensamiento, porque ellos tienen muchos mecanismos para controlar y manipular a las conciencias de las personas.
 
Quedan tres antiterroristas cubanos en prisión…

Tenemos una deuda de gratitud con todos los amigos del mundo por lo que han hecho por nuestra libertad. Pero tenemos aún muchísimo por hacer, porque no nos conformamos que Ramón y Antonio cumplan su sentencia, como la cumplimos René y yo. Hacerlo significaría que Gerardo nunca regresara. Por eso los amigos de la solidaridad en el mundo deben seguir presionando para que los tres salgan y regresen lo más pronto posible.

¿Sientes que la Revolución y el pueblo cubano te cumplieron?

Me cumplieron. Nos cumplen. Pero es que nunca tuve dudas. Nosotros estábamos claros de cuál era nuestra responsabilidad, y que debíamos resistir. Estábamos conscientes de que públicamente, o no, íbamos a tener el apoyo de la Revolución, del pueblo de cuba. Y esto incluye a muchos cubanos residentes en Estados Unidos y el mundo. Un día se decidió que la defensa y apoyo a los Cinco se hiciera pública. Eso fue una decisión política. Pero aunque no hubiera sido así, nosotros sabíamos que no íbamos a estar solos.

lunes, abril 07, 2014

ZunZuneo: una ilusión llamada al fracaso

Por: Raisa Martín Lobo

Nuevamente  el gobierno de los Estados Unidos apuesta por  liderar acciones subversivas contra Cuba y el escenario  esta vez lo ocupa  las redes sociales. Desde hace unos días, salió a la luz datos sobre ZunZuneo, un aparente Twitter cubano, una especie de  plan secreto de la Agencia Internacional para el Desarrollo de Estados Unidos (Usaid), creado con el objetivo de deteriorar nuestro proyecto político y social y sobre todo, sembrar la subversión especialmente en los jóvenes como protagonistas.
 
Una vez más los autores del supuesto ZunZuneo,  pretendieron aplicar en Cuba la misma receta usada en Irán, Libia, Filipinas y otras naciones, a través de mensajes   “inocentes”  a los suscriptores, tales como  la previsión del tiempo o resultados deportivos, que tuvieran como tras fondo impulsar acciones de protesta y subversión con los jóvenes, a quienes seducían con la posibilidad de intercambiar mediante estas conexiones conversaciones, materiales, música, películas y juegos en línea.
 
Pero este  nuevo engendro, ZunZuneo,  a su vez tendría un segundo momento y es donde  los mensajes se tornarían políticos y tendrían como fin persuadir a los usuarios para provocar una “primavera cubana”, es decir, una rebelión, teniendo en cuenta la importancia que tuvieron las redes sociales en revueltas como las de los países árabes.
 
Ahora un nuevo debate se abre a la palestra pública mundial, y es si este hecho de guerra cibernética fue o no aprobado por el gobierno de los Estados Unidos  o por su Presidente Barack Obama. Y no está lejos de imaginar que tras las sin números de mentiras inventadas para ser protagonistas del habitual show mediático, nunca van a ser receptivos al aceptar que el ZunZuneo se inscribe como una flagrante violación de la legislación internacional e incluso de la propia norteamericana.
 
Una vez más queda demostrado que acciones como ZunZuneo quedarán registradas en la historia de la Agencia Central de Inteligencia, como una de sus más ineptas operaciones de guerra cultural contra la Revolución cubana. Sin embargo,  nos deja una lección: las redes sociales, el acceso a Internet en nuestra época,  no es un lujo, sino un deber y un derecho, por tanto, se impone la necesidad de mantenerse vigilantes en su uso. 

ZunZuneo demostró a Cuba que no es más que una ilusión llamada al fracaso. Por  esta vez, como por otras, no se salieron con la suya, sin embargo, estoy completamente segura de que  vendrán otras acciones, teniendo en cuenta las  cifras millonarias que cada año destina el gobierno estadounidense para la subversión a Cuba. Y esto sin lugar a dudas,   demuestra que la subversión política e ideológica ha devenido a lo largo de estos años un instrumento indispensable de la política de Estados Unidos contra la Isla.

Hasta el momento y está demostrado por más de 50 años, ningún gobierno norteamericano ha encontrado la vía de llegar a los cubanos. Ahora bien, de lo que sí puede estar seguro el Imperio es, que aunque coloquen  sus esperanzas en querer derrotar nuestra Revolución apoyados en los nuevos adelantos tecnológicos, volverán a fracasar porque su terquedad e ignorancia no les deja ver más allá de sus narices.